El coaching tiene su origen en el campo de los deportes con la figura del coach – entrenador, quién trabaja con equipos o individuos para lograr un desempeño extra-ordinario. El coaching organizacional y personal como disciplina genérica que se extiende más allá del campo de los deportes, surge de esta experiencia.
El objetivo del coaching es asistir a individuos, equipos y organizaciones para superar significativamente sus niveles presentes de desempeño y enfocar sus conversaciones y acciones hacia nuevos umbrales de posibilidades.
¿Cómo lo hace? El coach trabaja con el individuo o equipo, fundamentalmente en el dominio del lenguaje, con competencias tanto conversacionales como de escucha, en sesiones acotadas en un período de tiempo establecido previamente entre las partes.
El coach trabajará con el cliente (coachee) abordando también en mayor o menor medida aspectos emocionales y corporales para que sean aliados alineados a los objetivos del coachee en lugar de auto-limitaciones.